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Por Emiliano Martin - Gastón Mangafas
Los habitantes del la costa carecen de luz eléctrica, asfaltos, agua corriente, gas y demás servicios. La obra de pavimentación de Espora todavía no se tradujo en cambios sustanciales para la zona, excepto por el crecimiento de un basural a cielo abierto. La pavimentación de Italia se espera como una panacea. Pese a que los habitantes de la costa bernalense daban por descontado que la pavimentación de unos 1500 metros de la calle Espora hasta la ribera misma traería mejoras en su situación habitacional, a casi un año de la obra deben admitir que nada de eso ocurrió.La zona sigue ofreciendo el mismo aspecto de olvido, y son sus propios habitantes los que logran que las cosas se sostengan, pese a sus limitados recursos. Uno de los ejemplos más claros está dado por la plazoleta del barrio, que con la tarea mancomunada de los residentes en la zona, se encuentra en mejor estado que muchos otros espacios verdes del distrito: nadie rompe los juegos, se corta el pasto, y no hay rastros de basura afeando su aspecto.
Por lo demás, los servicios tan anhelados por los residentes en la costa de Bernal nunca llegaron. Carecen de teléfono, de gas natural, de agua corriente, e incluso de energía eléctrica, pese a que la Comuna extendió una línea para abastecer al alumbrado público, que sin embargo termina trescientos metros antes de la costa.Los más osados idearon un sistema para obtener energía, mediante un cableado de suma precariedad, y distribuirla entre las distintas viviendas. Claro que los riesgos que esto trae aparejados son enormes, en especial ante la posibilidad de un siniestro, dado que la mayor parte de las viviendas son de madera y chapa de cartón.
Fuente: www.perspectivasur.com
Fuente: www.perspectivasur.com
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